26 sept 2013

Culture, vida y obra.

Aquellos años ’70, donde el reggae inundaba las calles de Jamaica, serán recordados por siempre para todos los amantes del género como la década dorada, originándose grandes solistas y bandas que hasta el día de hoy siguen siendo musas para todas las demas.
En esta columna vamos a hablar de Culture. Esta agrupación surgió en 1976, fundada por la dulce armonía de tres melódicas voces: Joseph Hill (22/1/49 – 19/8/06), Albert Walker y Kenneth Dayes. Poco a poco se fueron insertando dentro del mundo del reggae gracias a sus pesadas letras, cargadas de cuestiones políticas y sociales.

Pasaban los días, las largas tardes de ensayo y así fue como nació el primer disco titulado “Two Seven Clash”, material que fue producido de la combinación entre los dos productores más reconocidos denominados los ‘Mighty Two’ -  Joe Gibbs y el ingeniero Errol Thompson. Este trabajo fue grabado en los estudios de Gibbs logrando una alta popularidad que no solo se limitó en la isla sino que también llego hasta a Inglaterra.

En 1982 la banda comenzó a disolverse y cada uno tomo un camino distinto. Joseph se encargó de comprar los registros que le permitían seguir bajo el nombre de Culture y grabo su disco llamado “Lion Rock”. Albert y Kenneth también continuaron en la senda musical y se dedicaron a recopilar los mejores éxitos de la agrupación para luego amalgamarlos en un álbum, el “Roots & Culture”. De todas maneras esta separación no duro mucho tiempo ya que en 1986 se vuelven a juntar y fabrican dos de sus mejores trabajos “Culture In Culture” y “Culture At Work”.

En el ’93 Kenneth Dayes deja el grupo y es sustituido temporalmente por Ire Lano Malomo Taylor que luego fue reemplazado por Telford Nelson, quien actualmente sigue siendo parte de esta legendaria banda, la cual perdió en el 2006 a su representante vital, Joseph Hill, dejando como legado a su  hijo:  Kenyatta Hill.

Aquí les dejo un video para que disfruten:

4 jul 2013

Abriendo Caminos


Crear caminos y construir puentes no son únicamente actividades arquitectónicas, la comunicación y la difusión, gracias a la libertad de expresión, también son grandes influyentes para que se den estas cuestiones. La interacción entre personas, mediante el internet o la telefonía, permiten que se puedan romper las barreras geográficas y que cada uno entre en un oasis en donde se encuentran estas almas sedientas por compartir ideas y nutrirse culturalmente.

 

Aquí vamos a encontrar notas sobre un género musical que surgió por la necesidad de querer dar a conocer lo que sucedía en el mundo, informar sobre las atrocidades que la opresión y la desigualdad generaban, y generan, día a día. El Reggae no solo es música alegre y bailable, lleva en ella, y en sus letras, realidades que conviven con nosotros y que a pesar de ser cuestiones aceptadas por la sociedad como parte de nuestros días, lucha constantemente para dar a torcer el brazo de la hegemonía y así lograr una equidad cultural y racial. Letras como “One Love”, del estandarte Bob Marley, explican este entramado de una manera simple y profunda, demostrando como un sentimiento puede irrumpir en nuestras rutinas y así engendrar vínculos comunicacionales para incluirnos a todos dentro de la red sociocultural.

 

Las plataformas comunicacionales parecen ser parte de un sector privilegiado económicamente, si lo miramos globalmente. ¿Quién podría negar que en África hay más muertes por desnutrición, que celulares o computadoras? La globalización parecer ser el superhéroe al que todos honramos, pero no nos damos cuenta de que realmente existen diversidades étnicas que únicamente son respetadas si se conocen. Lo que genera miedo es lo desconocido y ante lo desconocido se responde con violencia, a la que algunos llaman, erróneamente, “civilizar”. Por eso es importante saber de dónde se originan estos ritmos que guardan en su interior gritos de auxilio, advertencias que aquí van a tener su espacio.